Hagia Sophia

Al mediados del siglo V después de Cristo, el mundo colapsó. La civilización como se conocía, las estructuras gubernamentales, la moneda, el derecho, la educación, el orden social, las rutas comerciales, las rutas marítimas, todo, todo terminó. Roma cayo, fue el fin del mundo. Los bárbaros invadieron el imperio y toda la civilización como hasta entonces la conocía el hombre, desapareció. La civilización clásica llegaba a su fin.

Pero hubo un lugar que soportó por 1,000 años más, Bizancio, el Imperio Oriental. Su capital, Constantinopla, la ciudad mas hermosa y maravillosa que ha visto el hombre, bautizada como "La Ciudad de Dios".

Por 1,000 años Constantinopla fue el bastión de la civilización clásica, todo el saber y el conocimiento de 4,000 años se concentraron ahí. Las artes y la filosofía se desarrollo en esa ciudad mientras Europa jugaba a ser un nuevo "imperio" y levantaba los pedazos de la civilización romana y reinterpretaba lo que podía. Europa se sumió en 1,000 años de oscurantismo y fanatismo religioso.

El 29 de mayo de 1453 cayó Constantinopla a manos de los Turcos Otomanos, los sabios que la habitaban salieron huyendo con mucho del conocimiento que ahí se preservaba, este hecho, junto con el descubrimiento de America, marcaron el fin de la edad media, el fin de los 1,000 años de oscuridad. El conocimiento y la civilización regresaron a Europa.

La semana pasada el gobierno del populista Turco Recep Tayyip Erdogan ha aprobado la ley en el parlamento Turco, obviamente todo controlado por él mismo, para que el museo de la catedral de Hagia Sophia sea convertido en una mezquita para el culto musulmán. Esto significa que los últimos reductos del pasado de Constantinopla serán borrados, lo poco que conservamos del glorioso Imperio Romano de Oriente que preservó la civilización de la oscuridad, será borrado.

El mundo vive días muy negros, nos aproximamos a una nueva edad oscura a pasos de gigante.